Gracias al trabajo desarrollado por la agencia Captive Media, bares de Londres cuentan con una novedosa herramienta de engagement, que logra atrapar por 55 segundos la atención de los consumidores.
En el bar londinense The Exhibit, los clientes masculinos que se acercan al orinal se encuentran con tres diferentes juegos que se activan con la orina de los usuarios. A través de un sensor, el juego inicia y los usuarios tienen que dirigir su pipí para tumbar pingüinos o para deslizarse en una pista de esquí.
El juego dura tanto como dure la orina del usuario y quienes tengan más “por descargar” serán quienes anoten los mejores scores. El juego ha tenido tanto éxito que los usuarios comparten sus récords a través de sus teléfonos móviles.
Además de la experiencia lúdica para el cliente, la estrategia de mercadotecnia se completa con anuncios publicitarios que aparecen antes y después de iniciar el juego. Se anuncian las marcas de las bebidas a la venta en el bar, y los dueños han registrado un notable incremento en sus ventas. (Vía BB)
